Midas, evolución_es_colaboración
La naturaleza premia a la cooperación, no a la competencia
En este capítulo analiza la gran importancia de la cooperación en la biología, desde el mutualismo entre seres vivos a la formación de seres complejos a partir de la cooperación de organismos más simples. Como ejemplos:
- Las células eucariotas no son más que el resultado de la cooperación entre distintos seres vivos.
- Los seres humanos nacen sin microbios, luego se van incorporando y en la edad adulta hay más seres microbios (bacterias, virus, arqueas,...) que propias células humanas dando lugar a lo que se llama micro-bioma humano. Estos seres, y sus genomas asociados, interactúan en muchos ámbitos como la eliminación de patógenos, modulación de nuestro sistema inmunológico, la síntesis de vitaminas y aminoácidos esenciales, digestión de nutrientes hasta, incluso la modificación de nuestro comportamiento. Nuestro cuerpo es un ecosistema de células humanas y microbianas. Los microbios dependen según la ubicación en el cuerpo y del huésped. La variación dentro del huésped a lo largo del tiempo es menor que la variación entre individuos, lo que sugiere que cada individuo posee un micro-bioma único relativamente estable. El micro-bioma no es más similar entre gemelos del mismo cigoto que entre los fraternales, lo que sugiere que el micro-bioma está más influido por las exposiciones ambientales (Ej la dieta) que por el genotipo
En la sociedad también es importante la cooperación y poco a poco se va imponiendo a la competencia, logrando así un mayor desarrollo de la humanidad